Tras nuevo procedimiento en conjunto, el rodado se detectó en un taller de 61 entre 32 y 34 por lo que se caratuló la causa como encubrimiento y se notificó al responsable del taller en cuestión.
En el marco de los operativos de control y fiscalización que agudiza la Municipalidad de Necochea mediante un trabajo en conjunto entre la gestión del intendente Arturo Rojas y las fuerzas de seguridad, para el ordenamiento y control del parque motovehicular, el área de Prevención y Monitoreo, junto a inspectores de Comercio y efectivos policiales, llevó adelante una intervención con detección de una moto con pedido de secuestro en un taller mecánico ubicado en calle 61 entre 34 y 32.

Durante el procedimiento, se detectó la presencia de varios motovehículos en el interior del establecimiento, por lo que se procedió a realizar tareas de verificación sobre las numeraciones de identificación registral de los rodados. A partir del trabajo policial, el sistema arrojó que uno de los vehículos presentes, una Yamaha Ténéré de alta cilindrada, registraba un pedido de secuestro judicial activo por hurto, ocurrido en 2023 en la localidad bonaerense de Hurlingham.
Ante este hallazgo, se informó que tomó intervención la Unidad Funcional de Instrucción de turno del Departamento Judicial de Necochea, caratulando la causa como encubrimiento y notificando al responsable del taller en cuestión.

Por su parte, los inspectores municipales labraron un acta de intimación en el marco de las regulaciones comerciales vigentes, en atención a la actividad desarrollada por el local intervenido.
Desde la Subsecretaría de Prevención y Monitoreo, a cargo de Ángel Vázquez, remarcaron que este tipo de operativos continuarán de manera sostenida, en coordinación con otras fuerzas, con el objetivo de combatir delitos vinculados al robo de motovehículos y garantizar mayor seguridad en la ciudad.